Un seminario en Roma sirvió de espacio para debatir las numerosas crisis en Europa y sus posibles soluciones. Si bien los participantes no compartieron todos los puntos de análisis presentados, sí acordaron la necesidad de liberarse del marco existente y la necesidad de una reinvención de la izquierda en nuestro continente.
El 20 de enero en Roma transform! Italia, la Fundación Rosa Luxemburg, transform! europe y Alternative per il Socialismo organizaron un seminario titulado «Europa – ¿Qué queda de ella?». El evento tuvo como base una reunión celebrada en Berlín en junio del año pasado en la Fundación Rosa Luxemburg. En esta reunión se presentaron 22 propuestas para centrarse en los aspectos críticos de la construcción de una Europa unida y para pensar en posibles puntos de convergencia entre los movimientos europeos que actúan en contra de esta construcción política y económica.
También hemos organizado este evento para coincidir con las próximas celebraciones de conmemoración del el LX aniversario del Tratado de Roma, firmado en 1957 y que representa el primer paso hacia la UE, tal como la conocemos hoy. A la reunión de Roma asistieron representantes del DiEM25, Plan B, miembros de la izquierda política y social, así como economistas y activistas de diversos movimientos.
Contribuciones valiosas y debates
La discusión se inició con Mario Candeias quien presentó una tesis en la que se esbozaron los diversos aspectos en los que se basa su propuesta y la filosofía que la inspiró: tenemos que hacer frente a la falta de construcción de una Europa unida, pero al mismo tiempo, luchar contra xenófobos y nacionalistas y la preocupante fragmentación de la izquierda en Europa, que limita nuestra influencia política. Él propuso abordar la cuestión de una manera no ideológica.
Fue la necesidad de la confrontación, resultante de esta dicotomía, la que originó diferentes enfoques durante el debate general de la izquierda y creo que nuestros intentos, aquí al menos, lograron atraer el interés de personas con opiniones diferentes y con diferentes puntos de vista sin excesivos estereotipos.
La crisis de la integración europea
Además analizar la crisis de integración europea, las intervenciones mostraron un claro posicionamiento, así como algunos puntos de análisis compartidos. La necesidad de liberarse del marco existente y la necesidad de una reinvención de la izquierda en nuestro continente fueron aspectos que todos los participantes destacaron.
Los participantes también estuvieron de acuerdo en que la integración europea se ha creado (a través de varios tratados de la UE) para derrotar y marginar todas las formas de resistencia y alternativas a las fuerzas del mercado y a las políticas neoliberales. Como tal, a lo que nos estamos enfrentando no es a un descarrilamiento de un tren que se ha desviado, sino a un proyecto que se basa fundamentalmente en la devaluación del mundo del trabajo y las formas de democracia existentes.
Crear un espacio para el diálogo
Por supuesto, siguen existiendo diferencias y estás, probablemente seguirán sin resolverse, pero el debate fue eficaz, ya que salieron posiciones intermedias, que a mi juicio, no son atribuibles a ninguna de las propuestas existentes: Pueden expresar la semilla de un argumento útil para escapar de una confrontación estéril.
La cuestión de la soberanía popular y democrática y la definición de una propuesta que evite caer en la trampa del nacionalismo reaccionario de la derecha, la necesidad de unirse en torno a una propuesta izquierdista para romper con los sistemas existentes y la acumulación de fuerzas necesarias para poder hacerlo realidad siguen pendientes. Pero es cierto que la creación de un espacio de diálogo entre muchos puntos de vista políticos sigue siendo importante y contribuye valiosamente al crecimiento de una izquierda capaz de superar los desafíos a los que nos enfrentamos.
Traducción: José Luis Martínez Redondo