Más de 1.500 personas de España, Francia, Grecia, Italia, GB y Alemania, entre otros, participaron en la conferencia del "Plan B" del 10 al 21 de febrero en Madrid. Los debates cursaron sobre las políticas de la Unión Europea y las alternativas de las organizaciones de izquierda europeas con el fin de cambiar el curso neoliberal de la UE. También se debetió si es posible cambiar y transformar la UE. Más de 3.000 personas participaron en el acto de cierre que se celebró el domingo.
Los objetivos principales de la conferencia fueron los siguientes:
- Luchar contra el mensaje de que “no hay alternativa” después de la imposición del tercer memorando a Grecia
- Normalizar algunos debates con respecto a la ruptura con las instituciones y los tratados de la UE con el fin de fortalecer a la izquierda en Europa contra chantajes potenciales futuros por parte de la Troika
- Mejorar la coordinación de los movimientos sociales a nivel europeo, promoviendo campañas de movilización en toda Europa.
- Creación de un movimiento internacionalista que sea capaz de enfrentarse a la TROIKA, a sus chantajes y a su extorsión.
TLos debates se centraron en 7 ejes: Deuda, Moneda, Comercio internacional, Migración, Feminismo, Protección social y laboral y Protección del medio ambiente. La metodología participativa fue muy útil y exitosa para lograr las conclusiones que se publican aquí:
http://planbeuropa.es/wp-content/uploads/2016/02/Resumen-Ejecutivo-1-1.pdf http://planbeuropa.es/wp-content/uploads/2016/02/Ejes-pol%C3%ADticos.pdf
También se aprobó un llamamiento en la conferencia. El acuerdo principal es un día de acciones a nivel europeo el 28 de mayo.
El mensaje central durante los talleres y debates era que la UE es antidemocrática y que los pueblos europeos necesitan una estrategia común para enfrentar los chantajes y las políticas neoliberales de la TROIKA.
La mayor parte de participantes estaban de acuerdo de que era necesario crear un movimiento europeo para unificar las diferentes luchas en Europa y poder cambiar las cosas. Hubo opiniones divergentes sobre la posibilidad de cambiar las instituciones de la UE.
Los pueblos de Europa no aceptan más sacrificios por una moneda que está fuera de cualquier control democrático. Es su deber y compromiso forjar un plan que les capacite, cuando lleguen al gobierno, a defender a las personas del uso del euro y/o la liquidez como arma contra ellas. Las personas presentes en Madrid dijeron claramente que no permitirán una repetición del golpe que se produjo el pasado verano contra Grecia. Y que están dispuestas a luchar por sus derechos.
En conclusión podemos decir que necesitamos otra Europa de solidaridad, anti-austeridad, a favor de la mayoría social, democrática y antirracista.