Las nuevas elecciones del 26 de junio dan esperanzas para un escenario político sin precedentes: Gracias al acuerdo de Podemos e Izquierda Unida (IU), esta es la única coalición que podría revertir la situación creada por las elecciones del 20 de Diciembre. Todos los sondeos atribuyen actualmente a esta coalición alrededor del 24% de los votos – mucho más que al PSOE.
España se encuentra actualmente en una situación inusual debido a la crisis aguda del régimen político que ha gobernado el país desde que se recuperó la democracia en 1978. La crisis económica y el enfoque de gestión neoliberal adoptado están en la raíz de esta crisis política. La consecuencia fue una enorme ola de manifestaciones que tomó forma concreta en el movimiento de los indignados. Este movimiento expresa las demandas de regeneración democrática y las demandas de los sectores más afectados por la crisis económica. Como reacción al sistema bipartidista que había gobernado el país (PSOE y PP), el pueblo exigió más democracia. El viejo sistema utiliza indefectiblemente la misma política económica, está plagado de niveles insoportables de corrupción y ha seguido ciegamente todas las medidas impuestas por la Troika.
Una de las consecuencias de esta crisis del "régimen del 78" es la aparición de dos nuevos partidos políticos con características diferentes: Podemos y Ciudadanos como representantes de la nueva política frente a los viejos partidos del régimen. Podemos representa una regeneración progresista (incluso si el partido no se identifica a sí mismo como "izquierda", las personas lo hacen) y Ciudadanos una liberal.
Desde la creación de Podemos, Izquierda Unida ha tratado de forjar un acuerdo con este partido, con miras a la creación de convergencias políticas y sociales para quitar el poder al bloque dominante. Este enfoque fue un éxito en ciudades importantes como Madrid y Barcelona y regiones como Cataluña y Galicia con resultados notables. La intención de IU era repetir estas coaliciones a nivel nacional, pero no fue posible para las elecciones generales del 20 de diciembre en la que IU obtuvo unos resultados muy pobres debido a la ley electoral. El partido, sin embargo, logró una gran aceptación social, por lo que su líder, Alberto Garzón, es el político mejor valorado en el país.
Las elecciones del 20 de diciembre provocaron el fin del sistema bipartidista y los resultados fueron una manifestación física de la crisis política, lo que ha hecho imposible formar un gobierno. Durante los tres meses de negociaciones, el PSOE llegó a un acuerdo con Ciudadanos, a pesar de los repetidos intentos de Podemos y IU por formar un gobierno progresista con el PSOE. Esta decisión del PSOE, que prefirió un acuerdo con los liberales a uno con la izquierda, ha profundizado, a su vez, su giro hacia la derecha y las personas lo ven responsable de la falta del gobierno en España.
El resultado electoral dejó clara una cosa: Lla ley electoral premia la unión de fuerzas. La suma de Podemos y los votos de IU en las elecciones del 20 de diciembre los situó como la segunda fuerza política, que, si se hubieran presentado juntos, les habría dado mucho más peso para negociar un gobierno progresista. Este es el enfoque que ahora se toma en el período previo a las nuevas elecciones del 26 de junio. Las bases de Podemos y de IU han hecho hincapié en la importancia de una convergencia de ambos partidos.
El acuerdo entre Podemos y UI (Unidos Podemos) ha sumido a la derecha y al PSOE en el caos, ya que Podemos y IU juntos es la única coalición que podría revertir la situación creada por las elecciones del 20 de diciembre. Todos los sondeos atribuyen actualmente a esta coalición alrededor del 24% de los votos – mucho más que al PSOE.
Pero aunque es cierto que es posible lograr un gobierno progresista, también hay una serie de riesgos. El primero es que el segmento de la clase dominante más cercano a los socialdemócratas está tomando medidas para formar una gran coalición (PP-PSOE) para bloquear un gobierno de la izquierda. Esa es la razón por la que la coalición de Podemos-IU aspira a ganar las elecciones, para evitar a la derecha. Con el fin de hacer eso, Podemos e IU han acordado un programa mínimo de 50 puntos, para poner fin a la austeridad y llevar la democracia al país. Somos conscientes de la importancia que esta coalición tiene para el resto de la izquierda europea. Somos conscientes de que la esperanza puede venir desde el Sur y que la próxima batalla para poner fin a la austeridad está en España, el 26 de junio.
El programa “50 pasos para gobernar juntos” se encuentra a la derecha (pdf)
Traducción: José Luis Martínez Redondo