El congreso internacional “El poder de la crítica: vías del marxismo-feminismo”, organizado por la sección feminista del Instituto de teoría crítica de Berlín (InkriT) y la Fundación Rosa Luxemburgo con el respaldo de transform! europe, se celebró del 20 al 22 de marzo en Berlín con más de 500 participantes. La fuerte afluencia logró que para finales de febrero las plazas del congreso ya estuvieran completas.
En las ponencias y talleres, en las conferencias sobre Rosa Luxemburgo y las presentaciones de libros, las participantes disertaron acerca de los diversos temas principales sobre el estado del marxismo-feminismo, desde perspectivas distintas o controvertidas, a veces incluso de forma acalorada. Se trató del primer congreso mundial sobre marxismo-feminismo que jamás se haya celebrado; al mismo tiempo que China prepara el primer congreso internacional sobre marxismo, previsto para el 10 y 11 de octubre de 2015. En todo caso, fue un acontecimiento "histórico a nivel mundial", como comentó una de las participantes.
El punto de partida del congreso fue la elaboración de la entrada "Marxismo-feminismo" para el recién publicado tomo 8/2 del Diccionario histórico-crítico del Marxismo, un término para designar un movimiento y una lucha al que Frigga Haug definió en primer lugar como concepto con un origen y con autoras relevantes; así comienza su artículo: "El marxismo-feminismo se caracteriza por el esfuerzo y la lucha para conseguir dar cabida en el marxismo a la ‘revolución feminista’. La resistencia a la que hace frente le obliga antes que nada a adoptar una forma polémica y de oposición. El objetivo de la revolución feminista es la liberación de las mujeres de la dominación masculina y, lo que únicamente es posible entonces, la transformación de la sociedad en una sociedad solidaria".
Hemos observado cómo desde los años 70 en muchos países del mundo, las feministas han tomado la palabra en los círculos marxistas. Estas criticaron el concepto del trabajo y la teoría del valor empleados en el marxismo de entonces, su situación en lo relativo a las tareas domésticas y a la familia, las relaciones interpersonales y con el medioambiente, con la economía y las guerras, sus perspectivas de futuro y reivindicaciones de liberación. Y a este esfuerzo debemos agradecer el hecho de que muchas de las antiguas activistas hayan asistido al congreso. Cientos de activistas de las dos generaciones siguientes recogieron el testigo y disertaron en las conferencias durante más de 10 horas diarias acerca de desarrollos, nuevos planteamientos y posiciones diversas en torno al marxismo-feminismo.
Aun así quedó patente que el marxismo-feminismo es un concepto en gestación, "que todo está en constante cambio", como destacó enfáticamente Katja Kipping, presidenta del partido de izquierda Die Linke, en su discurso inaugural. ¿Cómo se convierte una en marxista-feminista? Katja Kipping advirtió cómo el feminismo y el marxismo pueden llevar a una especie de doble vida, hasta que el bloqueo mental inconsciente termina por resolverse, ya que a fin de cuentas, ambos tienen como meta "acabar con todas las situaciones en las que el ser humano se ve humillado, esclavizado, abandonado y despreciado". Ha llegado el momento de hacer una confesión: "Soy una marxista feminista". Para abreviar: "Soy una ma-fem", proclamó a modo de autoafirmación.
A partir de la historia de la opresión de las mujeres, Frigga Haug desarrolló en su introducción la siguiente tesis: Las relaciones de género son relaciones de producción. La producción de la vida debería incluirse dentro de las relaciones de producción. Para la investigación y la política necesarias, Haug abogó por una unión global de las feministas marxistas para que las cuestiones de la vida no puedan subordinarse en ningún caso a las ansias de hacer beneficios.
Las ponencias abordaron temas tales como Aprender de la historia; Crítica de los feminismos contemporáneos; Puntos de intervención; Perspectivas de una sociedad humana. A esto se sumaron las conferencias sobre Rosa Luxemburgo, impartidas por Saskia Sassen y Gayatri C. Spivak. Se realizaron talleres sobre cuestiones como: Proletariados femeninos; Las luchas por el tiempo; Conflictos en torno a la capacidad de actuación; Análisis del sector de los cuidados; Relaciones entre el ser humano y la naturaleza; Neoliberalismo, política y educación; Líneas de conflicto entre igualdad de género y resistencia (véase el programa).
El congreso reunió a numerosas personas en torno a una variedad de temas, poniendo en común experiencias de distintos movimientos marxistas-feministas. La marcada diversidad de edades impresionó a muchos, al igual que la activa participación en cada uno de los actos. Se abordaron los debates iniciados hace 40 años en muchos países del mundo, enfocando lo conocido bajo una nueva luz y propiciando un intercambio de opiniones entre las numerosas asistentes más jóvenes; se delimitaron áreas temáticas, se destaparon lagunas y se sacaron a la luz las controversias, entre otros puntos, acerca de los criterios de interseccionalidad y la importancia de las relaciones de clases. La sección feminista del InkriT y la redacción femenina de la revista Das Argument abordarán y ahondarán en los temas y las discusiones, empleando documentos del propio congreso, en el número 314 de la revista (otoño de 2015).
En el marco del congreso, se presentaron dos nuevos libros sobre el tema:
Shahrzad Mojab: Marxism and Feminism (Marxismo y feminismo), Zed Books, Londres 2015, 400 páginas, £21,99 | $30,95
Frigga Haug: Der im Gehen erkundete Weg. Marxismus-Feminismus (El camino que se explora al andar. Marxismo-feminismo), Argument Verlag, Hamburgo 2015. 384 páginas, rústica, 24 €
El congreso marcó un punto de partida. Numerosas mujeres se ofrecieron como voluntarias para la redacción de un informe continuo, y se debatió sobre el primer borrador del mismo en la sesión de clausura, elaborado en base al trabajo realizado en este congreso (formulado en 14 tesis por Frigga Haug). La siguiente conferencia será organizada por Diana Mulinari y Kerstin Sandell del Institute for gender studies de la Universidad de Lund, entre otras personas.
Sobre el congreso, véase también el artículo de Cynthia Cockburn en Open Democracy: Trabajo, vida y amor: Las marxistas feministas unen los puntos (en inglés)