La elección de Francisco creó, obviamente, un nuevo clima en las relaciones entre la Iglesia y la izquierda europea. En la reunión de septiembre de 2014 entre el Papa, Alexis Tsipras y Walter Baier se aprobó, en un principio, iniciar un nuevo proceso de diálogo entre católicos y marxistas.
La primera experiencia se llevó a cabo del 31 de marzo al 1 de abril de 2016, en el Instituto Universitario Sophia, cerca de Florencia, Italia. Los organizadores fueron la Congregación del Vaticano para la Educación Católica, el Movimiento de los Focolares y transform! europe. En la declaración sobre la motivación y el contenido del diálogo se dice por las tres partes:
"A la vista de las dificultades y peligros actuales en el mundo, todas las personas de buena voluntad deben unirse con independencia de sus filosofías, sus religiones y sus enfoques teóricos y prácticos, para encontrar formas de salida a la crisis. Para citar a Francisco, son necesarios tanto la transversalidad como un diálogo a través de las líneas divisorias tradicionales (…)".
Ambas partes están de acuerdo en el establecimiento de una "Mesa de Trabajo", con el fin de que cada uno entienda mejor el otro lado, y "realizar un trabajo de análisis y soluciones ampliamente compartidas y, cuando sea posible, definir los campos de acción conjunta".
Entre los análisis compartidos se encuentra "la convicción de que la Tierra fue dada a todas las personas, es decir, la humanidad como totalidad, incluyendo a las generaciones futuras. Así, la cooperación quiere contribuir a todas y todos los habitantes de nuestro planeta para que los seres humanos puedan vivir una vida digna, en paz, libertad y justicia". La declaración destaca también que "las diferencias de puntos de partida son consideradas como un enriquecimiento y pueden contribuir a clarificar, profundizar y proponer los puntos de vista propios".
La crisis medioambiental y económica, la justicia social, la migración y los derechos humanos fueron algunos de los principales temas abordados. Los participantes fueron muy diversos: académicos, activistas de ONGs, teólogos, economistas, políticos y organizadores culturales. También estuvieron representadas varias generaciones. La delegación de transform! constaba de Walter Baier (Viena), Peter Fleissner (Viena), Cornelia Hildebrandt (Berlín), Michael Löwy, (París), Giulia Rodano (Roma), y la Santa Sede estuvo representada por Vincenzo Zani, Secretario de la Congregación para Educación Católica y Stefano Zamagni (Academia Pontificia de Ciencias Sociales). La mayoría de los participantes estaban vinculados al Movimiento de los Focolares: nuestros anfitriones, Bernhard Callebaut y Paolo Frizzi, de la Universidad Sophia, Catherine Belzung (Francia), Lorna Oro (Irlanda), Alejandra Herrero (Argentina), Herwig Van Staa (Innsbruck), Franz Kronreif (Austria), y Herbert Lauenroth (Alemania). Otros participantes fueron Pasquale Ferrara (Universitario Europeo de Florencia).
La Encíclicas Evangelii Gaudium y Laudato Si del papa Francisco y su contribución a un punto de vista crítico, humanista y solidario, por supuesto, fue un elemento importante en las discusiones, y sirvió como referencia tanto para los católicos como para los participantes marxistas.
Se puede considerar esto como un evento histórico en las relaciones entre la izquierda europea y la Iglesia Católica, que ha conocido muchos altibajos en el pasado. El Simposio fue un éxito notable, gracias a la alta calidad de los intercambios y la calidez de las relaciones humanas. Los debates se desarrollaron en un ambiente de amistad y simplicidad, donde los títulos académicos o eclesiásticos se dejaron de lado, y los participantes se llamaban por el nombre de pila. Había realmente un proceso de aprendizaje y un enriquecimiento mutuo. Por supuesto que hubo diferencias de opiniones, conceptos, de énfasis y en las soluciones propuestas, pero hubo una abertura auténtica hacia "el otro" y un verdadero interés en la comprensión de sus puntos de vista.
El diagnóstico del papa sobre la crisis del medio ambiente como resultado de un "sistema estructuralmente perverso" fue ampliamente compartido por los participantes, así como la necesidad de una alternativa a las políticas neoliberales absurdas e irracionales de "austeridad", promovidas por los líderes europeos actuales. Los participantes de transform! propusieron un debate sobre las alternativas socialistas o ecosocialista, más allá del modo de producción capitalista, y del "modo de vida" capitalista.
En su comentario sobre los intercambios, Vincenzo Zani observó que ahora estaba convencido de que la ecología y el medio ambiente deben ser parte de la educación católica en todo el mundo. La necesidad de medidas concretas sobre el tema del cambio climático, y la solidaridad con los inmigrantes que tratan de encontrar un santuario en Europa fue otra conclusión común.
¡Esto es solo el comienzo! Los organizadores coincidieron en la necesidad de continuar con esta iniciativa, ampliar y profundizar los intercambios. Habrá también una publicación con las contribuciones al Simposio.
Traducción: José Luis Martínez Redondo